El defensa francés Jonathan Bijimine fue una de las sorpresas en el once del Logroñés este finde jugando como central izquierdo al lado de Caneda, pero la sorpresa acabó peor de lo que se podía esperar.
El jugador que volvía a la categoría de bronce tras su paso por el extranjero fue expulsado en el minuto 72 al ver su segunda amarilla y complicó las opciones de su equipo ante un rival sobre el papel muy inferior.
Se trata de un jugador con fama de tener ‘mala cabeza’ y esto no le ayuda.
Esperemos que se centre y demuestro que va sobrado para esta categoría, ¡suerte Joni!.